“Si la vida te da limones, haz limonada”, ¿ha escuchado ese refrán popular? Como los limones son ácidos, se usan para referirse a algo difícil, un mal momento incluso, y hacer limonada es una respuesta positiva, una actitud que nos recuerda que podemos sacar algo bueno de aquello que parecía ser negativo.
Bueno, eso es precisamente lo que ha hecho la empresa Parada La Manzana en la comunidad El Limón, ubicada en Samaná y conocida principalmente por su Salto El Limón, de aguas frías y entorno verde en la montaña, que ahora se ha visto afectado por la sequía. A la espera de que el agua vuelva a caer con su fuerza acostumbrada, ha organizado otra actividad, el tour “Rodando por Morón”, que recorre en “four wheels” o “buggies” algunas de sus playas en un trayecto de alrededor de cuatro horas, con comida incluida.
El tour empieza en la comunidad ecoturística El Limón, donde puede interactuar con su gente, amable como la gran mayoría de los dominicanos, luego toma ruta hacia las playas, deteniéndose en algunos parajes vistosos, especialmente de montaña, para tomar fotos; luego cruza por la comunidad Agua Sabrosura y sigue hacia las playas.
La primera a la vista es Playa Las Canas, donde encuentra manglares y también está la desembocadura del río Cantón (¿alguna vez sintió la diferencia en sus pies cuando el agua dulce toca el agua salada de una playa? La arena se siente más suave y la temperatura cambia drásticamente, así que si va, pruébelo en cualquiera de las playas que visitará).
Tres datos sobre Playa Las Canas: primero, su nombre se refiere a las palmeras, y hay muchas de ellas; segundo, de las playas a visitar, esta es la que suele tener más oleaje, aunque Salvador Alcalá, de Parada La Manzana, dice que se pueden dar un delicioso baño y tercero, posee un amplio fondo de arena y es un lugar especialmente romántico…
La siguiente parada es Playa Brisas del Norte, con 800 metros de longitud, amplio espacio de arena para caminar y oleaje moderado. Puede refrescarse y disfrutar del agua y del panorama… la fusión del cielo y el mar da la sensación de que estamos viendo una postal.
Luego llegamos a Playa Morón, que da nombre al tour. Con cerca de 500 metros de arena suave, color dorado, esta playa de aguas turquesa localizada entre la costa rocosa al oriente de la desembocadura del río Limón, tiene una vista espectacular.
Aquí la pausa es más larga, de aproximadamente una hora, para que puedan disfrutar de su agua, su arena y la belleza que rodea todo el lugar. Bañarse en esta playa, que Salvador describe como “la de los bellos atardeceres”, es un lujo.
Esta playa apartada tiene algo de historia, observa alrededor y podrás ver los cañones franceses originales del siglo XVIII, utilizados por el ejército de Napoleón en 1802, cuando los franceses ocuparon esta parte de la isla y montaron su defensa para tratar de aplastar la revolución de los esclavos en Haití.
El tour termina en el restaurante Parada la Manzana, donde le espera un bufé que seguro le sabrá a gloria.
Esta propuesta definitivamente nos da una lección. Tomó una situación “difícil” (que sería el limón de nuestra frase inicial y aquí se refiere a la sequía en la ruta tradicional), y mientras espera su solución ¡hizo “limonada”!
Miriam Veliz
