
Consideramos que la medida tomada actualmente por el Ministerio de Medioambiente y Recursos Naturales, es fundamental para la conservación de este importante lugar que contribuye a evitar las desforestaciones, falta de agua y todos los males que se crean cuando hacemos daño a la naturaleza, al medioambiente. Tenemos un ejemplo de una isla vecina como Haití que ha sido devastada, y es muy poco lo que en los últimos 30 años han recuperado. En fin, que en Valle Nuevo no se está tomando medidas caprichosas o sin causas demostrables o exceso de autoridad, más bien es la única forma de conservar una de las principales fuentes de generación de agua, tanto para el consumo humano como agropecuario, indispensables para la sobrevivencia del pueblo dominicano.
Me llena de satisfacción que se estén dando los pasos para evitar el desastre ecológico que hasta el momento se fomentaba, en los alrededores de los altos de Tireo, en La Culata y en la Ciénega de los Bermúdez. De manera, que nuestros lectores los estimulo a que si van a disfrutar hoteles, hostales, cabañas de montaña, lo hagan en Jarabacoa y Constanza, donde disfrutarán del clima de este momento que se mantiene entre 2 y 4 grados, los más bajos en muchos años, y dejen que nuestras autoridades concluyan la tarea en Valle Nuevo, a donde incluso se ha recomendado cerrar el acceso motorizado desde la alta montaña de Manabao hasta La Culata, y luego quizás –esto no lo sé-, ni se lo he escuchado a ningún ambientalista, se cree alguna ruta de sendero que permita visitar el parque, pero con todas las reglas de cuando visitamos una reserva nacional.
Por Victoria Curiel